viernes, 31 de julio de 2009

Mis pequeños amigos


Hace años que llegaron a mi vida y aún no se como agradecerles que me eligieran a mi, aunque aún no me explico el por qué de esa elección. De hecho, creo que no fué para salvarme sino que fue precisamente por mi delicado estado y mi debilidad en aquella época el motivo de que se fijaran en mí, era tan vulnerable...

¿Qué quién son ellos? Pues eso es muy dificil de explicar, pero intentaré hacerlo empezando por cómo los conocí.

En aquella época mi vida transcurría entre mi cama y mi sofá, no tenía ánimo para nada más, podía pasarme semanas completas sin salir de casa, sin ganas de ver a nadie, comiendo lo primero que pillaba por casa, si había algo de comer o si ese día tenía ganas de comer, que no siempre era así. Del mismo modo, podía pasar días sin pasar por la ducha, o sin salir de la cama, sin cambiarme de ropa... Vamos, que era un zombie de andar por casa, y no me pregunteis por qué, porque la verdad es que no recuerdo cuando y por qué empezó aquella situación. Pero bueno, fuera lo que fuera que me llevó a aquel "dejarme llevar", al menos me valió para que ellos se fijaran en mí. El primer día que vi uno de ellos, no supe reconocer lo que estaba viendo, de hecho, mi primera idea fué enfrentarme a él y tratar de aplastarlo pensando que era un molesto mosquito rodeando mi cabeza, esa fue la primera impresión, un pequeño ser rondaba mi cabeza y me molestaba haciendome cosquillas en nariz y orejas. Por más que intenté aplastar aquel pequeño punto negro que me molestaba no pude llegar ni a rozarlo. Esa fué la primera y como veis, la primera impresión no fué muy buena, pero poco a poco, aquellos seres siguieron visitándome, aunque poco a poco, fueron depurando su técnicas de acercamiento, ya no había cosquillas ni molestias, ni me daban ganas de aplastarlos, ya que fui comprendiendo que no eran mosquitos, como había llegado a pensar en un primer momento, si no seres inteligentes haciendo alguna especie de estudio de mi organismo.

No se de donde vienen (me gusta pensar que de otro planeta) ni como acabará esta historia, pero desde que se han introducido en nuestro cerebro, en el que entran por mis oidos, donde están excavando millones de galerías. Ahora puedo verlos con mas claridad, ya que saben que no les voy a hacer daño y pasan delante de mis ojos sin ningún pudor. No se como acabará mi cerebro, cuanto tiempo seguirán explorándolo ni si se preocuparán de no hacerme daño una vez concluido su estudio (si es eso realmente lo que hacen), lo que si se es que desde que se han instalado en él lo veo todo con mucha mas claridad. Ya no tengo miedo a salir de mi casa, lo único que temo es que alguien se de cuenta de que ellos están conmigo, hablándome, diciéndome en cada momento de quién puedo o no fiarme, donde puedo o no entrar, a quién debo o no seguir...

Si, ellos me guian. No se dejan ver cuando salgo, solo salen de mi cabeza alguna que otra vez pero solo estando en casa, a solas. Cuando estoy en la calle, se que están ahí, a mi lado, dentro de mí, guiando mis pasos aunque no los pueda ver porque se comunican conmigo a través de pequeñas descargas, según la intensidad de estas descargas puedo saber exactamente lo que quieren. Ayer mismo, caminando por el centro de camino a casa, una mujer a la que nunca había visto me miró desafiante, de arriba a abajo, y una fuerte descarga eléctrica me sobrecogió y de repente ví claramente la cara de aquella desconocida con los ojos envueltos en llamas, una cara esquelética, terrorífica, de dientes afilados, me miraba como el león que mira a su presa. Entonces supe lo que querían, la seguí hasta su casa y pasé la noche allí, frente a su puerta, tratando de adivinar su oscuro secreto. Otra descarga me devolvió a la realidad, dejándome ver que tenía cosas mas importantes que hacer aquel día. Pero no me fuí de allí sin más, hice una marca en su portal y apunté los datos que había en su buzón, ya volvería a ella en otra ocasión, ellos me marcarían el camino... Ahora tengo que volver al trabajo, el trabajo que ellos me marcaron, como vigilante de seguridad. Un trabajo importante, que me permite observar a mucha gente al día, como ellos quieren. Son muchos los rostros que he marcado gracias a ellos, los datos que he recogido de todos ellos y, aunque todavía no he actuado contra ninguno de ellos, sé que pronto empezará la acción, la verdadera acción, y comenzaré a limpiar el mundo de todos monstruos que ellos me han enseñado. Hasta entonces, seguiré firme en mi trabajo, disfrutando de su pequeña y discreta compañía.

5 comentarios:

SILVIA dijo...

A partir de ahora, voy a mirar a los mosquitos de otra manera. Te lo aseguro!!! Buen relato, aunque escalofriante. Mil besitos!!!

SILVIA dijo...

Tienes un premio pendiente de recoger en mi blog. Pasate a recogerlo cuando te apetezca. Mil besitos!!!

Princesslyss dijo...

Que bien escribes.
Me gusta mucho este blog tuyo (que no es el único eso creo).
Me pasaré más veces a mirarlo y volver a meterme en el papel del jugador.
Adios y muchos abrazos.
:)

Princesslyss dijo...

por cierto Princesslyss soy yo Nerea
(de todo un poco)

NERIM dijo...

Bonito relato jumentillo!
Espero que esos amigos tuyos te hablen bien de mí....
Besotesssssssssss